(Journal 1887-1910)
Jules Renard (1864-1910) francés
Ed. Debolsillo 2009, 299 pág.
-diarios, literatura francesa-
Publicado en 1925, años después de la muerte del autor, me imagino que se trata en este caso de un texto abreviado para esta edición, que sin embargo, supongo contiene lo más esencial. En mi caso es interesante leer el Journal después de Poil de carotte (Pelo de Zanahoria), ya que se parte de un cierto conocimiento del escritor que siempre ayuda a la hora de entender sus ideas.
Jorge Luis Borges dijo que Renard era el verdadero inventor de las greguerías, aunque el nombre se deba a nuestro Ramón Gomez de la Serna y quizás tuviera razón. Es precisamente en esas frases cortas, dónde el genio de Renard brilla más:
-"No hay amigos: hay momentos de amistad"
-"Un silbido vencía los aplausos de mil manos"
-"Solo hago vida social cuando tengo ganas de aburrirme"
-"Me apasiona la verdad, y las mentiras que permite"
-"En el fondo de todo patriotismo está la guerra, por eso no soy patriota"
-"Nuestra vida parece un ensayo"
-"Hay rincones tristes del paisaje donde el cazador, de repente, se asusta de su escopeta"
-"Un enterrador cavando. Se diría que va a plantar muertos para que crezcan vivos"
-"Recientemente una obra suya ha sido prohibida por el público"
-"Se puede cambiar, y seguir siendo absurdo"
-"Es difícil ser bueno cuando se es lúcido"
por poner un ejemplo. Renard es un hombre infeliz y atormentado por un infancia desdichada. Su mirada es lúcida, su escritura ácida, cáustica, hasta cruel, pero con todos y con él mismo.
En el Journal encontramos gran cantidad de esa especie de aforismos. Comentarios sobre las personalidades de la vida literaria y algún político, así como de sus amigos escritores o actores y la vida teatral. Y finalmente retazos de su vida personal, todo ello tratado con ese peculiar estilo inteligente y pesimista, que en cualquier caso sorprende por su modernidad.
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