Nietzche y el viejo caballo de tiro

Friedrich Nietzsche (1844-1900)
Me cuesta leer a Nietzsche. Dudo si se trata de un visionario o de un loco, pero tampoco me gustan demasiado los iluminados, los profetas.

Cuesta leer a Nietzsche siendo mujer. Sus ataques son continúos. Puedo comprender su misogínia después de una infancia llena de mujeres, la perla de su hermana y sus desamores, pero incluso así, cuesta leerle.
"Sin embargo, todo esto casi se desvanece ante la escena del 3 de enero de 1889, en Turín, en la plaza Carlo Alberto. Nietzsche asiste a una escena en el que un cochero pega duramente a su viejo caballo de tiro, incapaz de seguir arrastrando su carga en la noche lluviosa, entonces el filósofo se abraza llorando al cuello del animal y después se desploma." (1)
Este acto puede considerarse o bien su último acto de lucidez o el primero de su locura. Van a recogerlo y es internado por "una parálisis progresiva" definición imprecisa de una enfermedad mental que hasta hoy no se ha descifrado claramente.  Después pasa al cuidado de su madre y a su muerte al cuidado de la hermana. Durante algún tiempo puede hablar algo y tocar el piano. Poco a poco emperora hasta su muerte por una apoplejía.
 
Nietzsche abrazando a un caballo en Turín. Escena de la película italiana "Al di là del bene e del male" (1977)
(1) El Autor y su Obra "Nietzsche" Fernando Savater, Ed. Barcanova, 1982
"Nietzsche, de filólogo a Anticristo" José María Valverde, Ed. Planeta, 1993

Comentarios